Más de 15.000 familias se han beneficiado hasta la fecha del trabajo pionero de la Fundación Bento Rubião con los programas de Derecho a la Tierra y Derecho a la Vivienda en Río de Janeiro. Estos programas tratan las cuestiones de regularización fundiaria y planificación urbanística, y también utilizan enfoques innovadores para la provisión de vivienda.

 

Descripción del Proyecto

Fines y Objetivos

  • Garantizar el derecho de los más pobres a una vivienda digna facilitando ayuda técnica para la construcción de viviendas a través de ayuda mutua y procesos participativos.
  • Facilitar asesoramiento jurídico para garantizar el acceso a bienes raíces.
  • Concienciar acerca de la crisis de la vivienda mediante actividades educativas como talleres, seminarios y publicaciones para que se comparta información.
  • Influenciar la creación e introducción de una política de la vivienda.

El déficit actual de la vivienda en Brasil es de 6,5 millones de viviendas. Un 84% de las viviendas están ocupadas por familias con unos ingresos mensuales por debajo de los 258$. Estas familias comparten la vivienda, viven en penosas condiciones, en la calle o en zonas de alto riesgo; o gastan la mayoría de sus ingresos en el alquiler. Al menos un 30% de la población de Río de Janeiro vive en “favelas” o en terrenos mal delimitados, sin acceso a una tenencia segura o a una infraestructura adecuada.

La Fundación Bento Rubião se ocupa de una serie de problemas relacionados con la vivienda desde la carencia y malas condiciones de la misma hasta la posesión de bienes raíces de forma ilegal y la amenaza de desahucio que eso supone. Está organización se fundó en 1986 por un grupo de líderes de las barriadas y profesionales técnicos, y su cometido es el de resolver la falta de actuación gubernamental respecto a los sectores más pobres de la población y la imposibilidad que tienen estas personas para acceder a vivienda y a una infraestructura mínima mediante un sistema de mercado convencional.

Los tres principales campos de actuación de esta fundación son movilizar y fortalecer los grupos comunitarios, defender los derechos de los niños y adolescentes, y ocuparse de temas relacionados al terreno, a la vivienda, y al sustento. Bento Rubião se centra en los sectores más pobres y más vulnerables como las familias que viven en favelas sin acceso a tenencia segura. Las actividades que realiza la fundación son la rehabilitación de las barriadas, la construcción de vivienda mediante ayuda mutua y los procesos participativos, la normalización del régimen de bienes raíces, la transmisión educativa y de conocimientos, y la formulación de una política de la vivienda.

El programa actúa en dos frentes: el proyecto Derecho a la Propiedad se ocupa de la tenencia de bienes raíces y planificación urbanística, y el de Derecho a Vivienda crea propuestas alternativas para la vivienda.

El primer proyecto se involucra en la provisión de asesoramiento legal, social y urbano, al igual que facilita el acceso a tenencia segura para grupos que están sin techo, que van a ser desahuciados, o que tienen derecho a un régimen de bienes raíces reglamentario según la legislación actual creada a escala municipal y nacional. Además, 11.589 hogares se han beneficiado hasta la fecha. En los últimos dos años, el número de familias que han recibido ayuda ha aumentado anualmente de 1.000 a 4.000, y se espera que suba a 5.500 por año en el próximo trienio.

El segundo proyecto implica la construcción de viviendas mediante la ayuda mutua y la creación de cooperativas. El equipo interdisciplinario de la fundación se ocupa de facilitar la ayuda técnica, y el terreno permanece en el dominio colectivo de la comunidad. El coste de la vivienda es de un 30% a un 50% más barato que la vivienda comercial, y el dinero que pagan los residentes va a un fondo rotativo, que se utiliza para invertir en otros proyectos parecidos. Este proyecto ha construido un total de 1.358 viviendas.

En el proceso de construcción se utilizaron materiales tradicionales y de la zona como ladrillos y bloques de hormigón. Allí donde fue posible, los materiales se compraron a empresas pequeñas cuyos empleados vivían en la zona. El proyecto facilita el acceso a agua y a una infraestructura urbana. También la luz natural adecuada y una buena ventilación ayudan a ahorrar energía y mejorar las condiciones de salud.

Los residentes participan en todas las fases del proyecto. Bento Rubião facilita la ayuda técnica y el asesoramiento legal que los ciudadanos necesitan sobre los temas relacionados con el diseño, planificación, desarrollo y gestión del proyecto. La autogestión de los recursos es un elemento importante del programa y está diseñado para otorgar la autoridad a los residentes, fomentar una participación activa y crear una sensación de apropiación del proceso dentro de la comunidad. A través del proceso de ayuda mutua, los residentes han adquirido aptitudes para la construcción y muchos de ellos, incluso mujeres, han conseguido trabajo regular en el sector de la construcción. La organización está colaborando en la actualidad con otras ONG para formar y capacitar a 50 líderes de las barriadas, de las cooperativas de vivienda y los grupos comunitarios.

El gasto medio unitario por cada nueva vivienda es de 4.500$, y el gasto medio unitario por cada documento de bienes raíces es de 35$. Los recursos para el proyecto se han obtenido en colaboración con el sector público, iniciativas sociales organizadas, y agencias donantes internacionales. El proyecto está financiado en la actualidad por Novib, Misereor, el Inter-American Foundation, el Ministerio de Ciudades de Brasil, el CAIXA Federal Development Bank y el gobierno municipal de Río de Janeiro. Los residentes también contribuyen con su mano de obra y con una cuota mensual de unos 26$ que van a un fondo rotatorio durante unos 10 o 12 años. Esto se puede comparar con una cuota mensual de 50$ durante unos 20 años dentro del sistema de financiación pública, por una casa de peor calidad en términos de diseño y construcción.

La Fundación sigue recibiendo financiación de las agencias donantes internacionales y del gobierno local y central. Los fondos que depositan los residentes se utilizan para financiar proyectos parecidos en otras cooperativas; ya se han asignado fondos para los próximos tres años.

 

¿Por qué es innovador?

  • Bento Rubião es la única ONG en Río que trabaja con el tema de la normalización de los bienes raíces y la provisión de asesoramiento legal a los grupos vulnerables afectados por los problemas del régimen de la bienes raíces. La Fundación también ha sido la primera en utilizar el sistema de ayuda mutua para la creación de vivienda social en Río de Janeiro en la década de los noventa.
  • La tenencia de bienes raíces es conjunta y se considera como un bien comunal.
  • El fondo rotatorio permite que los fondos recogidos de las cuotas a plazos que pagan los participantes de una cooperativa se utilicen para financiar proyectos parecidos en otras comunidades.
  • La construcción de las viviendas se caracteriza por su bajo coste y superior calidad en términos del diseño arquitectónico y de construcción en comparación con la construcción de vivienda social normalizada.
  • Bento Rubião trabaja con las dos caras de la moneda, actuando de raíz y formulando políticas de vivienda.
  • La Fundación ha creado una legislación innovadora en colaboración con el gobierno municipal de Río de Janeiro de cara a la construcción de viviendas y la normalización de la tenencia de bienes raíces en asentamientos ilegales, que garantiza que la normativa esté hecha a la medida para las condiciones físicas y sociales de estas comunidades. Y los proyectos se realizan mediante un proceso participativo.

 

¿Cuál es el impacto medioambiental?

El proyecto incorpora una serie de prestaciones medioambientales sostenibles como la producción de gas de fermentación producto de los residuos orgánicos, sistemas alternativos de tratamiento de aguas residuales y separación de los deshechos para su reciclaje, y una utilización razonable de los recursos energéticos e hídricos. Otros aspectos ecológicos del programa incluyen la creación de zonas verdes en el entorno urbano y la creación de un huerto comunal para el consumo de verduras en la cocina comunitaria.

 

¿Cómo es su sostenibilidad financiera?

Como consecuencia de este proyecto, la vivienda se ha hecho asequible para los sectores de la población más débiles que vivían en condiciones precarias, los cuales no podían comprar una casa en un sistema de mercado y que no tenían acceso a préstamos o a tenencia de propiedad segura. Mediante el Programa de la Fundación de Bienes raíces y Vivienda los residentes contribuyeron económicamente y con mano de obra propia, y se construyeron casas a través de un proceso de ayuda mutua con la ayuda técnica de la Fundación. Todo eso a costes más bajos y con una mayor calidad que la vivienda social normalizada. La creación de cooperativas de trabajo ha ayudado a generar ingresos para las comunidades; el proyecto también implica formación y capacitación para los jóvenes, para las mujeres y los líderes de la comunidad. Los proyectos realizados por la Fundación, la tenencia de la tierra es de dominio conjunto y se considera un bien comunitario.

 

¿Cuál es el impacto social?

Una mayor cooperación e integración comunitaria es uno de los objetivos principales del proyecto. Los residentes trabajan en equipo para diseñar las viviendas, planificarlas, desarrollarlas, construirlas y gestionarlas. Se realizan talleres participativos y las comunidades reciben el apoyo de la Fundación en relación con los aspectos sociales y técnicos del proyecto.

Bento Rubião apoya de forma activa las iniciativas urbanas populares que luchan por conseguir unos derechos mínimos de propiedad y vivienda para movilizar y capacitar a los grupos que deciden jugar un papel activo en la sociedad. Las iniciativas sociales organizadas en algunas ciudades brasileñas han conseguido resultados importantes, tanto a escala local como a escala nacional, en cuanto a la política de vivienda, legislación y acceso a terreno y a vivienda.

Obstáculos Encontrados

  • Hubo retrasos debido a la dificultad para explicar conceptos jurídicos complicados, en especial a los miembros analfabetos de la comunidad.
  • Una pesada carga de trabajo entre los miembros del equipo técnico significó que a menudo no había tiempo para discutir ni para formarse.
  • Los intereses particulares de los líderes de las comunidades a menudo chocaban con los esfuerzos de colaboración y cooperación.
  • Encontramos obstáculos ajenos como la violencia urbana, el tráfico de drogas y el crimen organizado de las barriadas y de las comunidades así como la burocracia y largos periodos de espera de procesos judiciales.
  • Cuestiones estructurales de desigualdad y pobreza fortalecen una distribución irregular de los bienes raíces y de ingresos en el país.

Lecciones Aprendidas

  • La participación y movilización de los grupos comunitarios sobre los temas de vivienda urbana provoca soluciones más adecuadas a sus propias necesidades, crea un sentido de apropiación y les concede autoridad, al igual que les facilita los conocimientos necesarios para mejorar su entorno vital.
  • A pesar de todas las dificultades y obstáculos a los que se enfrentó el proyecto, merece la pena el hacer frente a los problemas económicos y políticos, al crimen organizado y a las consecuencias de la pobreza para defender los derechos de los grupos marginados sin derecho a bienes raíces y a vivienda; y esforzarse en reducir las desigualdades sociales y económicas. Según van adquiriendo un domicilio habitual, una escritura de la bienes raíces, las vidas de esa gente se transforman.

 

Evaluación

La Fundación evalúa constantemente el Programa de Bienes raíces y Vivienda mediante una planificación institucional integrada, y un sistema de seguimiento y evaluación.

El proyecto y su enfoque han llevado a grandes mejoras en la calidad de vida de los residentes de esas comunidades mediante la provisión de vivienda de gran calidad y acceso a tenencia de propiedad segura. Un mayor nivel de estima, la creación de empleo y de ocasión para generar ingresos, el fortalecimiento de los círculos sociales y la disminución de la vulnerabilidad son algunas de las consecuencias que se han podido identificar.

El proyecto ha tenido un efecto sobre la normativa municipal y ha creado mecanismos de normalización de la tenencia de bienes raíces que afectarán a los residentes de los asentamientos ilegales en las zonas metropolitanas en general.

 

Transferencia

El trabajo de la organización ha conseguido asesorar a las políticas municipales y nacionales de la vivienda, en particular en materia de régimen de bienes raíces. Al principio de 2004 Bento Rubião y el Ministerio de las Ciudades firmaron un acuerdo para la normalización del régimen de bienes raíces en Rociña, una de las barriadas más grandes y notorias en Brasil. La Fundación participa de forma activa en la organización y coordinación ejecutiva del ciclo de Conferencias sobre las Ciudades de ese Ministerio (que son foros de participación para el debate sobre cuestiones urbanas como la política de bienes raíces de inmuebles y vivienda a escala local, regional y nacional).

Este proyecto ha sido copiado por otras comunidades locales, quienes al ver los resultados, han formado sus propios grupos y han pedido ayuda a la fundación Bento Rubião. Éste ha sido por ejemplo el caso de tres de las 19 organizaciones comunitarias que participaron en el programa: la experiencia con la cooperativa Shangri-lá llevó a la creación de la cooperativa de Herbert de Souza, que a su vez inspiró la creación de la cooperativa Esperança.

Varios grupos y familias ayudados por el proyecto Derecho a la Propiedad han aumentado de una media de 1.000 anual a una media anual de 3.000; al principio por el boca a boca y el hecho de que Bento Rubião es la única ONG que trabaja con normalización del régimen de propiedad en Río.

La experiencia con este proyecto ha sido copiada por el gobierno municipal de Río mediante su programa ADP-Río para la normalización del régimen de propiedad en las favelas.

La Fundación trabaja con otras ONG nacionales como FASE, IBASE, y otras organizaciones a escala de las comunidades que están realizando un trabajo similar en otras partes del país. El trabajo de la Fundación ha contribuido a una nueva legislación nacional sobre normalización de bienes raíces que es en la actualidad una de las prioridades del Ministerio de las Ciudades de Brasil.

Algunos elementos del proyecto se han trasladado a otras partes de Latinoamérica después que miembros de la Fundación participasen en seminarios y talleres en Brasil, Uruguay, Argentina, Cuba y Méjico.